ZELAYA SE REFUGIA EN LA EMBAJADA BRASILEÑA Y AGUARDA LLEGADA DE INSULZA

(Adital).- El presidente depuesto de Honduras, Manuel Zelaya, entró hoy (21) en el país y, por la tarde, estaba refugiado en la embajada brasileña, en la capital Tegucigalpa, confirman imágenes del local, hechas por los vehículos de comunicación del país. El mandatario llegó a la ciudad luego de viajar durante dos días por tierra. Su objetivo es instalar mesas de negociación en el país a partir de la llegada a Tegucigalpa del secretario general de OEA (Organización de los Estados Americanos), José Miguel Insulza, prevista para mañana.

En entrevista por teléfono, Zelaya explicó como entró en el país hoy, Día Internacional de la Paz y 86 días después del golpe de Estado de 28 de junio. "Casi media Honduras, media Centroamérica (...) 15 horas en diferentes transportes. Tuve colaboración, pero no puedo decirlo", dijo para TeleSur.
Él deberá esperar hasta mañana por la llegada de Miguel Insulza a la capital hondureña. "Mañana está aquí el secretario Insulza (...) ha anunciado que se quiere venir hoy mismo", aseguró Zelaya.

Su esposa, Xiomara Castro, dijo a la prensa local que está "muy contenta porque el presidente de la República, el presidente electo por todos los hondureños se encuentra en Tegucigalpa".

Xiomara garantió que Zelaya regresó en búsqueda de la paz e la concertación. "El presidente viene a buscar la paz de mi país, de nuestro país, de llegar a un gran diálogo, una concertación. Hoy estamos unidos por una Honduras nueva, por una nueva República", dijo.

Ella aún agradeció el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, por acoger su marido en la embajada de Tegucigalpa.

Miles de manifestantes favorables al ingreso de Zelaya llegaron al local después de horas concentrados delante de la sede de ONU (Organización de las Naciones Unidas), local antes indicado como abrigo seguro para él.

"Mucha gente reír, llora, abraza, celebra la presencia de Zelaya", dijo Adriana Sívori, corresponsal de TeleSur en Tegucigalpa. La convocación popular ha sido hecha en carácter de urgencia por el Frente Nacional de Resistencia al Golpe de Estado, que congrega las mayores organizaciones civiles del país.

El dirigente del Frente Juan Baharona dijo a la prensa que "es mucho difícil" las fuerzas armadas impedir la situación. "Las fuerzas armadas tendrían que hacer un derramamiento de sangre para impedir la situación", descartó.

Horas antes, el presidente de facto, Roberto Micheletti, aseguró que Zelaya no se encontraba en Tegucigalpa, y sí, "en una suite de un hotel en Nicaragua", ironizó. El mandatario estaba en Nicaragua desde su deposición y expulsión del país, el pasado 28 de junio.

El presidente venezolano, Hugo Chávez, elogió La acción de Zelaya. "Nos ponemos de pié para apoyar su iniciativa. Pedimos respeto a la vida de Zelaya, a la vida de su esposa y a la vida del pueblo hondureño, que seguramente ahora está en las calles", celebró. Según el venezolano, Zelaya ingresó en Honduras "cruzando montaña, río, acompañado de apenas cuatro compañeros".